jueves, 20 de julio de 2017

La importancia de no tener amigos.

He dejado de lado la vida social. Quizás es más apropiado decir que la he sincerado. No tengo amigos. Las relaciones sociales son por mero interés. Lo bueno de asumir esto es que se puede pedir cualquier cosa sin esperar nada. Lo triste es tener confianza en las personas, pensar que estarán ahí siquiera por la decencia de todas las veces que los he salvado. Pero en esta era solo los imbéciles se preocupan por el resto. Yo no lo haré nunca más. Que se pudran todos.

Me gustaría decir que ya no significan nada. Con algunos aún estoy de duelo, mientras que con cientos ya no tengo nada que ver. Llegará un momento en que nadie signifique algo para mi. Si alguien quiere seguir este camino, está desencantado del mundo y considera una cobardía suicidarse, estos son mis cinco consejos:

1) Una dosis de cinismo. La vida moderna implica encontrarse con personas con las que alguna vez tuviste amistad. Hoy no las odias, solo que te dan lo mismo. Por lo tanto, hay que saludar como personas civilizadas y listo.

2) Evitar cualquier conversación. Para ello es clave evitar los bares o locales nocturnos en los que las personas embriagadas se sienten con valor para acercarse a uno.

3) Eliminar sus nombres en la agenda del teléfono. Como este es un retiro cínico, siempre habrá grupos de WhatsApp de los que sería difícil salir sin provocar el acercamiento de los antiguos amigos para preguntar qué ha pasado. Eso implicaría una conversación y por consiguiente un retroceso. Pero si eliminas los nombres, evitarás saber con quien hablas y la tentación de iniciar una conversación con alguien cuyo luto aún no has superado.

4) Como en Facebook ya estás en contacto con gente que te importa y con la que nunca has tenido amistad, cerrar la cuenta es una opción que cierra puertas. Se pierde información sobre convocatorias, congresos, novedades, etc. Pero lo que sí se puede hacer es dejar de seguir a los contactos que no te interesan. No verás sus actualizaciones, no sabrás de ellos, en fin, te ayudarás a dejarlos partir.

5) Continuando con el punto anterior, recomiendo dejar de seguir a todos aquellos contactos que publiquen más de tres noticias que te perturben. Sea los que informan sobre maltrato animal, los que viven pendientes de la política, los que reclaman contra todo. Al menos esos son los perfiles que me molestaban y que ahora simplemente puedo ignorar.

Un corolario: Como ya no tienes expectativas en ninguna otra persona puedes escribir o pedirle a cualquiera lo que sea.





miércoles, 12 de julio de 2017

Planes, planes...

Con el plan A) no voy del todo bien. No corre al 100% pero algo he avanzado. Más me he distraído buscando departamentos en España, en las ciudades donde podría hacer el doctorado. Mi plan para renunciar a mi trabajo aburrido y empezar como independiente ha sido matizado. El 21 tengo hora con una psiquiatra, según mi psicóloga tengo el síndrome de burnout pero eso debe ser diagnosticado por una especialista, que pueda recetar medicamentos y eventualmente dar licencia.

Hoy apareció otra situación. Este semestre que viene sigo haciendo clases en la misma universidad de siempre Y de otra universidad me han pedido que dicte dos cursos. Estar dentro del 3% mundial en mi área parece ser bueno...¿pero en Chile? Entonces me sumo al grupo de gente que se aburre de este país. Nunca enviaría una carta al diario para contar las razones por las cuales es bueno irse de Chile. Tengo doble nacionalidad, podría vivir en cualquier país de Europa.

Pero la situación es la siguiente: Si mi plan ahora es empezar a vivir el 2018 en Europa, necesito seguir ahorrando. Para eso no me sirve renunciar a mi trabajo aburrido y lanzarme como independiente. Pero a menos que siga con medicación, no puedo soportar lo patético que es mi trabajo. Quizás la psiquiatra me encuentre para el gato y me obligue a tomar licencia, con lo que no podría hacer clases en ningún lado. El lado bueno de eso es que seguiría recibiendo el sueldo sin tener que ir a ese lugar que me apesta. El lado malo es que si me va mal con Europa, tendría que volver por acá y haber dejado plantadas a dos universidades a comienzos del segundo semestre no me apetecería.

Otra cosa que me he dado cuenta es que en realidad no tengo amigos. Actualmente, no tengo amigos. No es que sea del tipo antisocial, ni introvertido. Pero la realidad ha cambiado. Quizás yo mismo. Hubo una época en que tenía que estar cada fin de semana en distintos lugares, convivdado a distintos cumpleaños. De pronto me di la gana de empezar a no ir. Dejé de salir. Mis amigos de esa época siguieron el camino normal, hoy están casados y con los hijos ya entrando al colegio. Si coincidimos podemos salir a almorzar, tomar algo, pero estamos en distintas frecuencias. Uno de ellos está muy bien posicionado, es inteligente y además ha tenido suerte. Eso sí, en un momento de su vida necesito una cantidad importante de plata y se la presté. Tuve que cobrarle. Me carga cobrar. En eso me siento como una especie de último hombre de honor. Yo no podría deberle un peso a alguien y al mismo tiempo darme la gran vida. Eso lo hacen los rotos. Y los rotos hacen nata en Chile. Esa es otra de las razones para querer irme de acá.

Pero tampoco saco nada con odiar tanto el lugar donde nací. Si las cosas salen mal es posible que viva acá los próximos 50 años de mi vida. Si es que no vivo más, en mi familia la longevidad está en ambas ramas.

Resumiendo, tengo que terminar mi tesis antes del 16. El 21 iré a la psiquiatra. Esté a lo que ella determine. Puedo hacerlo.


sábado, 1 de julio de 2017

Sí, prefiero vivir.

Me han descubierto. Entre no existir y estar vivo prefiero lo segundo. Un punto clave a favor de ella, me hizo ver muy bien que no es que quiera dejar de existir, sino que no que me gustaría estar existiendo de otra manera. Hagamos cuenta que tengo méritos pero que no me satisfacen.

Si he destacado en muchas áreas y no estoy conforme, la duda es saber qué me gustaría hacer, dentro de las opciones lícitas por cierto. Y llego hasta acá. Tengo que terminar mi tesis, ya ni sé para que. Pero bueno, podría intentar con estos planes e ir asumiendo a medida que resulten o no las oportunidades

a) Defiendo mi tesis en septiembre.
a.1) En 2018 postular a un PHD fuera de Chile con beca del Estado chileno: Harvard (via LLM), Yale (via LLM), NYU (via LLM), Tulane, UCLA, Emory; Ediburgh, Glasgow, Aberdeen. En Escocia, atento al SAAS.
a.2) Postular a un doctorado en España con financiamiento propio.
a.3) Postular a un doctorado no presencial, puede ser en Aberdeen o en Valencia, ver costos.
a.4) No hacer un doctorado (escenario b)

b) No hago un doctorado:
b.1) Me dedico más a mi trabajo y acepto la realidad de vivir en Chile.
b.2) Sigo viviendo en la casa familiar hasta que tenga plata para comprarme una casa o departamento al contado.

c) PERO:
Si hago el doctorado tengo la oportunidad de encontrar trabajo en España como profesor universitario. Si vendemos algunos de los bienes que tenemos en Chile podría volver a Europa con algo más de 200.000 euros en el bolsillo. Eso sería suficiente para:
c.1) Comprar un par de pisos y arrendarlos a estudiantes Erasmus, en ciudades universitarias como Valencia.
c.2) Comprar un piso donde vivir.
c.3) Estando en España puedo ver si estoy en condiciones de trabajar como abogado o como profesor universitario.
c.4) Averiguar cuanto impuesto tendría que pagar por llegar a España con plata.

Este programa tiene una vigencia de cinco años. Hasta que cumpla 43. Si a esa edad sigo en Temuco, uso los ahorros que de todos modos tendré, conoceré una mujer nacida entre 1987 y 1991 (soltera que andaría por los 35-31 años), nos casaremos, tendremos un par de hijos, los criaremos bien y estaremos juntos hasta que la muerte nos separe.

En conclusión.
Julio: Terminar tesis. Defensa a fin de mes o en septiembre según disponibilidad del profesor.
03: Enviar avance de tesis.
04: Corregir pruebas y subirlas a intranet. Fijar prueba de recuperación de mis estudiantes para el 13 de julio.
Conseguir licencia médica del 17 al 21 de julio si hace falta.
Tomar exámenes de repeticiónel 26 de julio.

Agosto:
Trabajar y afinar la tesis si fuese necesario.
Empiezo con clases del segundo semestre.
Repasar alemán o inglés.
Ordenar la continuidad de la oficina.

Septiembre:
Defender tesis.
Pedir vacaciones. Días administrativos. Viajar a Europa para el 18, si es posible.
Inscribirme doctorado en España

Octubre:
Renunciar al trabajo a contar de 1 de octubre.
Seguir con las clases.
Empezar a buscar clientes y cobrar honorarios adeudados.

Noviembre:
Dar el TOEFL y la prueba de suficiencia de alemán.